miércoles, 23 de mayo de 2007

grandeza

Se me llenan de lágrimas los ojos por la emoción que me produce pensar en lo inmensamente gigantes que son mis viejos.

Sospecho que la adultez me da por las bolas.
Me acabo de sorprender al encontrar un cd dado vuelta en la parte de arriba de mi cpu que no es mío y ahora mismo lo puse y suena bien y sonrío tan sólo por haberme sorprendido por lo menos, una vez en este día.

mocos

Estar enferma es diferente a.
Resulta ser que el domingo a la noche empecé a sentirme mal. Después de hacerme un te, una sopa y otro te pero con esos sobrecitos que te curan me pude dormir. Cuando me desperté eran algo así como las siete y media de la mañana, levanté el teléfono y ál son de -ma...tengo fiebre, pedí auxilio. A la hora pasó el aita en auto para traerme a la casa en la que vivo hace tres días.
Ayer le preguntaba a mi mamá cómo hacían las mamás para enfermarse, porque claro, ellas no podían ir a la casa de la suya y dejar a los hijos por ahí, entonces pensaba en Ali y Ceci, cuando ellas se sienten mal, pobres, ellas no pueden sentirse mal. Y esa fue la respuesta de mi madre. Simplemente no podés.
Hace tres días que estoy en pijama y que los perros son mi compañía. Mi viejo me hace la comida, y duermo muuuchaaaas horas en su cama que es la más grande, más cómoda, más linda de todas. Los perros me siguen el pasó y están a punto de traerme el papel higiénico con el que me sueno la nariz o limpiarme la bandeja.
Hoy ya me siento un poco mejor, pero tampoco tanto como para seguir con la vida. Y me pregunto, cómo van cambiando las cosas cuando pasan los años, porque yo me doy el lujo de venir a instalarme con mis viejos, de tener te caliente con sólo pedirlo, los globus, el actron y la seven up pero no puedo hacerme la otaria y hacer como si los días no pasaran, no puedo dejar mis responsabilidades de lado. O si?

Y empiezo a creer que en realidad extrañaba mi casa y la compañía de mis viejos y que esta enfermedad tan sólo fue una excusa para parar el mundo y bajarme.