lunes, 3 de diciembre de 2007

Camilo es mi sobrino, tiene tres añitos y hace tiempo A. le regaló un jueguito de basquet de esos chiquitos y ayer le dice a su mama algo asi.

Cami: y la tía Marina y A., cuando me van a traer el basket?
Mamá: no, la tia Marina no está más con A....
Cami: mama, decile que se arregle, que me regale un basquet y que se vuelva a peliar!!!

siempre hay quilombito en un cielo de dos




será un melodrama vulgar,


pasado dos meses nos consolarán
llorarás con un ojo y con el otro te reirás

Lo increible de Solari es que le da sonido a las mentes, claro, le pone onda a todos estos bolonquis del coure que transita cualquier perejil, y ahí vamos, imaginando River estallando cuando nos ilusionamos con que ojalá esas letras tuvieran mi imagen y nos conformamos escribiendolas en un blog o diciendo, cerveza en mano, que temazo flight 956.