domingo, 28 de diciembre de 2008

Desde que pensé en lo inesperado como forma de vida, muchas sucesiones de inesperadas cosas empezaron a suceder.
Tampoco fueron tantas, pero me gusta pensar que así fue.
Los diciembres son así. Nada de pensar el año balances blabla.
En el fondo quiero empezar el futuro, que llegó hace rato, que llegue en un rato.
Si me dieran la palanca de maniobra, ahora no buscaría lo inesperado, sino que pase lo que quiero que pase, que sería supongo en un tiempo algo tan perfectamente inesperado y cambiante que qué se yo.
Si me dieran la palanca de maniobra ahora ya sé yo para dónde la giraría. Ya sé qué estaría bueno que sea.
punto final.

buenos finales mejores comienzos para todos...