miércoles, 19 de diciembre de 2007

manga de drogones


“Lamento decirte, lector, que (los consumidores de opio) forman una clase en verdad muy numerosa. (...) Se me hace dificil creer que nadie que haya gustado los divinos placeres del opio pueda luego descender a los goces groseros mortales del alcohol.
Doy por sentado que quienes ahora lo comen nunca comieron y quienes siempre comieron ahora comen mas"

Thomas De Quincey; "confesiones de un inglés comedor de opio", London Magazine, 1821




Y es que Norteamércica nada tiene que ver, o al menos nada tenía que ver, con el hecho de encerrar en la cárcel a chicos de 17 por -imbuidos por el espíritu del capitalismo y del mercado libre, del ánimo emprendedor del empresario- haber cultivado en sus casas un poco de cannabis, al tiempo que todos los demás fumamos sin parar nuestrso Camel, degustamos con placer nuestro Absolut, devoramos sin reservas nuestro prozac.





una vez hace como diez años, lei una carta a otra persona que decía:
sos mi rebeldia

y desde ese tiempo que quiero que alguien me diga lo mismo, así como por casualidad.