El café con leche le devuelve el alma al cuerpo, después de haberla dejado
en el bar al que iba a los quince y que dije que no iba mas pero vieron como es esto, después de una noche que destroza cualquier espectativa, y que llena el cúmulo de noches-fracaso a las que estoy acostumbrada más no resignada.
1 comentario:
Ja, entiendo...
No se como vendriamos en el ranking
aunque intuyo un cabeza a cabeza.
Nadie lleva la delantera en el fracaso, es como cuando vemos estallar una bomba, hay un epicentro y afecta por todos lados.
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